ALFONSINA Y EL MAR
Sobre la vida de Alfonsina Storni
Esta triste canción ha terminado dejando una honda huella en mi vida. Desde que tengo memoria ha estado entre mis discos, en las interminables listas de mis canciones predilectas, como un trasnochado hit. En junio de 2015 tuvo lugar un hecho que la desempolvó del baúl de los recuerdos, una anécdota que la puso en valor —como se dice ahora— y que la engrandeció a mis ojos miopes como obra maestra del género. Después de ese episodio que narro ahora aquí, singularmente sirvió de banda sonora en las exequias fúnebres de un gran amigo. Sobre ese amigo versa la mitad de mi primer libro. En la presentación de ese libro en la Biblioteca Viva de Al Ándalus en septiembre de 2018, a la que no solo acudieron mis amigos y familiares sino también los suyos, quise releer públicamente aquel capítulo curioso sobre esa canción que nos perseguía, y pude hacerlo magníficamente acompañado por dos mujeres artistas, a las que quedaré eternamente agradecido.